D. SUERO DE QUIJANO

 

 

        Por la presente, el que suscribe, descendiente de todas las tribus y clanes conocidos e ignotos, caballero de las ilusas hazañas, habitante y gobernador de la Ínsula Vegataria, con la sola compañía de su grave voz, se propone:

 

        Romper trescientas mil lanzas verbales con las que espera crear un vínculo de sublime amistad con su reverenciada, la Dama Única, dueña del Castillo Tapial, situado al pie de los montes Torcales.

 

        Para ello, retará a todo ilustre caballero que se disponga a puentear el circuito magnético de la Firme Pilastra que sortea el caudaloso y retorcido Otreut, en la muy noble y ajardinada villa de Zenabit.

 

        Los contendientes se valdrán de armas incruentas, supervisadas por honrados, gentiles y demócratas caballeros; consistentes en ondas electromagnéticas, lumínicas, sonoras o térmicas.

 

        Será declarado vencedor de cada justa aquel caballero que consiga retrasar o desviar cualquier parte del cuerpo de su adversario.

 

        El perdedor de cada combate peregrinará a la villa de Agueva, donde se encuentra el Castillo Tapial, y se postrará  a los pies de la Dama Única, proclamando que ella es la más virtuosa, inteligente y bella de cuantas féminas pueblan el orbe.

 

        En la muy noble ciudad de Lancia, capital del Reino Legionense.

 

        En el primo día de las idus de mayo del año sexto dual.

 

 

                                                       Honorino Joaquín Martínez Bernardo